Cuidar tu salud tiene mucho que ver con seguir los ciclos de la Naturaleza.
Según la filosofía china nuestro equilibrio se ha de regir por las mismas leyes universales que rigen la vida. Cada uno de nosotros somos una unidad completa más pequeñita que forma parte de una unidad completa mucho más grande, que es el universo.
Adaptar nuestras rutinas a la estación en la que nos encontramos es primordial para mantenernos saludables.
VERANO, LA ESTACIÓN DEL CORAZÓN (Elemento Fuego)
El verano es la estación más cálida del año, donde predominan los días más largos y las horas de calor. El verano está asociado al Elemento Fuego o Corazón.
Calor es igual a Yang (calor) y en veranos o días calurosos puede dar lugar a un aumento del calor en el organismo o un calor de tipo patógeno que puede producir un exceso de Yang.
Y…. ¿cómo sabemos si tenemos un exceso de Yang? Síntomas como sed excesiva, sudoración continua, que vayamos poco a orinar, sequedad de la piel, boca seca, orina oscura, estreñimiento, etc. nos podrían indicar que nuestro cuerpo está acumulando mucho calor o mucho Yang. Es como cuando ponemos a calentar agua, si calentamos en exceso o durante mucho tiempo, poco a poco el agua se irá consumiendo hasta “secarse” por completo. Lo mismo sucede en tu cuerpo cuando le expones a altas temperaturas, no te hidratas lo suficiente o te encuentras en un ambiente con excesivo calor o sequedad.
Básico por tanto será mantener una hidratación continua.
Refrescate con agua de limón. El limón es ideal en el verano. Sus características astringentes y reguladoras, te ayudará a hidratarte, es un aliado perfecto de tu Hígado (elemento Madera), que le ayudará protegiéndolo del exceso de corazón (Fuego).
Aquí te traigo una receta fresca, saludable, cargada de vitamina C, ligera y detox.
Y super fácil de hacer!!!
En una jarra pon 1 litro de agua mineral, hielo picado (o en cubitos), el zumo de 1 limón exprimido, una pizca de ralladura de limón, 7 u 8 hojas de menta o hierbabuena…. y a refrescarse!
CORAZÓN Y ALEGRÍA
En verano estamos todos más contentos, verdad? Bueno, será por eso que la emoción del verano, del Corazón es la Alegría. El dinamismo, la calidez, la extroversión, ese movimiento que nos hace estar hacia fuera en nuestra energía y vida. Es importante concedernos momentos en los que escapar de la rutina, estar en contacto con la naturaleza, con los amigos y con los seres queridos. Pero como todo en la vida, los excesos nos llevan al desequilibrio. Una actividad desbordada, comidas en exceso o demasiado calóricas, reuniones interminables, una sobreexcitación mantenida o un exceso de alegría puede dar lugar a ciertos desequilibrios.
Para la Medicina Tradicional China un exceso de alegría esparce el Qi del corazón lo cual puede provocar una falta de concentración, dispersión mental o falta de compromiso, entre otros.
En estos días en los que aprieta el calor si no nos cuidamos pueden aparecer síntomas de inquietud, insomnio, falta de apetito, problemas de concentración. El cuerpo se vuelve más pesado, más apático, más lento, como si llevaras una carga extra de peso. Dormir se hace más difícil y nos podemos sentir de peor humor, más irritables y con mayor inquietud emocional. Esto se debe, entre otros factores, a que además del exceso de calor, la humedad típica de estación nos hace sentir como si fuésemos a cámara lenta.
Si este es tu caso, para contrarrestar estos síntomas limita el consumo de alimentos de sabor amargo tipo té, café, chocolate, etc. ya que estos alimentos influyen en el Corazón y en el elemento Fuego, muy activo ya de por sí en verano.
Si tienes pesadez, piernas hinchadas, mucosidad, edemas, etc. por el contrario consume alimentos amargos ya que estos “secan” y te ayudarán a reducir la humedad interna:
Utiliza verduras amargas como la endibia, rúcula, berros, escarola, alcachofas, pepinos, verduras de hoja verde en general, limones. Te ayudará a reducir las ansias del dulce, favorece tu digestión y a que elimines tóxicos.
- • Utiliza verduras amargas como la endibia, rúcula, berros, escarola, alcachofas, pepinos, verduras de hoja verde en general, limones. Te ayudará a reducir las ansias del dulce, favorece tu digestión y a que elimines tóxicos.
- • Consume alimentos ligeros, ácidos y de temperatura fresca. Pero cuidado, no enfries el cuerpo en exceso con alimentos muy fríos (agua helada, helados…). Consume verduras y frutas frescas de temporada y evita el consumir alimentos muy calóricos (bollería, carnes, embutidos, etc.). Son ideales las frutas de color rojo – el color del corazón y del elemento Fuego – como la sandía, las cerezas, los tomates, frambuesas, granadas, pomelo, etc.
- • Cuida las digestiones evitando consumir alimentos muy calientes y también muy fríos.
- • Aprovecha las horas de sol pero no agotes toda tu energía en un solo día. Acuéstate más tarde y levántate temprano para aprovechar las horas de sol.
- • Date baños de sol a primera o a última hora del día para cargarte las pilas con la energía del sol.
- • Practica ejercicios suaves, nada, camina por la naturaleza o practica yoga.
El sonido del corazón es la risa. Practícala siempre que puedas.